Arquitectura
Colegio L´ecole
El problema planteado en este caso era desarrollar un esquema de bajo presupuesto para la construcción de aulas, las cuales dieran el servicio de talleres (de pintura, música, danza y computación) para un colegio que va en crecimiento y que por tanto requiera expandir sus instalaciones.
Al inicio de este proyecto el cliente apostaba por una aglomeración sucesiva de espacios que fueran cubriendo el programa de necesidades y un solo modulo sanitario. Obviamente la primera tarea de la oficina fue convencer al cliente de que a pesar de ser una obra de bajo costo podía generarse una propuesta interesante. Ante esta postura el cliente acepto que se trabajara en varias propuestas para la construcción de dichos espacios.
Hubo varias ideas previas para este edificio y por lo tanto se decidió definir rubros a nivel técnico-económico el cual nos diera como resultado las directrices con las cuales llegaríamos a la propuesta más adecuada a la situación.
Los puntos más importantes contemplados para esta etapa del proyecto fueron:
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Utilización o combinación de una paleta (oferta) reducida de materiales
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Materiales de la región
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Materiales de bajo costo
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Técnicas y procedimientos de construcción básicas, sin complejidades
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Estructura mixta (marcos rígidos a base de trabes y columnas y muros de carga)
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Acabados aparentes o de bajo mantenimiento
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Proponer un edificio tipo núcleo y estático en lugar de uno de formas dispersas y dinámico
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Aprovechamiento al máximo de la iluminación natural
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Utilización de la ventilación cruzada
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Protección solar en la fachada posterior del edificio debido a su orientación
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Ductos de ventilación para lograr que todos los espacios respiren naturalmente (ventilación)
Lo anterior nos llevo a contemplar la siguiente frase como bandera de este proyecto: “Think global, act local”, obteniendo así un edificio que podría catalogarse como arquitectura regional pero que con intenciones trascendentales.
El programa arquitectónico finalmente queda definido de la siguiente manera:
1.Planta baja:
Patio de recreo bajo cubierta, Oficina administrativa, Escaleras, Cuarto de Maquinas, Bodega, Sanitario de maestras, Cocineta, Jardín.
2.Primer Nivel:
Escaleras, 1 Modulo sanitario niños/niñas, 4 Aulas.
3.Segundo Nivel:
Escaleras, Modulo sanitario niños/niñas, 2 Aulas para talleres, 1 Gimnasio.
El predio de dimensiones reducidas, 10 x 19 m y con una orientación sureste – noroeste se acoplaba de manera total con la idea de proyecto que se empezaba a generar. De manera simple se puede decir que el predio se dividió en tres partes las dos primeras hacia el frente de la calle, se ocuparon para desplantar el edificio y la última parte hacia la colindancia posterior se destino como área verde.
La planta baja se divide en dos zonas a lo largo del eje dominante del predio (sureste – noroeste) quedando destinada la parte izquierda del edificio para recreo y la derecha para albergar el programa arquitectónico antes definido.
El primer nivel se divide en su eje corto por un BLOQUE DE SERVICIOS que define la sucesión de los espacios correspondientes a escaleras, vestíbulo y modulo sanitario, así resulta que dos aulas quedan orientadas a la calle y otras dos hacia el jardín interior. Cabe mencionar que el BLOQUE DE SERVICIOS se ve acompañado paralelamente por dos ductos para proporcionar ventilación e iluminación natural. Dichos ductos comienzan a nivel de planta baja y se conducen hasta planta de azotea generando un tiro de chimenea que logra la salida del aire caliente y los malos olores recogidos de los sanitarios.
El segundo nivel repite el esquema del primer nivel con la excepción de que las 2 aulas orientadas al jardín interior, eliminan el muro que las divide para generar un gran salón para el taller de danza. Las 2 únicas fachadas que salva el edificio responden en sus aberturas a sus respectivas orientaciones, así tenemos que la fachada sureste presenta grandes ventanas y de formato horizontal y vertical, mientras la fachada noroeste es constituida por una misma piel calada por angostas aberturas verticales (troneras) que van de piso a techo.
La construcción fue a base de estructura (columnas y trabes) de concreto armado aparente, muros de tabique de barro rojo recocido en acabado aparente, muros repellados con cemento arena y pintados en blanco, pisos de cemento pulido con agregado de color, escalones de concreto armado con agregado de grano de mármol lavado y expuesto, ventanas en aluminio natural y vidrio claro, barandales y rejas en acero al carbón.
Para iniciar con el desarrollo de este proyecto y antes de intentar resolver el programa, hubo una pequeña directriz que se intento resolver lo antes posible, entendiendo que tal vez de ahí podría generarse la solución para todo el partido arquitectónico. Con esto me refiero a la imagen generada por la diversidad de fachadas que conforman finalmente la panorámica de esas calles, con una falta total de organización y pensamiento. Si bien es cierto que el Fraccionamiento de San Manuel se planteo sobre una traza ortogonal bien definida que incluía aéreas verdes y camellones, sus habitantes se han encargado de ir mutando cada uno de los edificios existentes, alterándolos en altura, paramento, forma, textura y densidad de construcción. Así hasta llegar obtener unas calles que muestran apenas vestigios de lo que fue un buen proyecto urbano y con una gran deformación en la gran fachada que integran cada una de las construcciones de cada calle.
Se pensó entonces cual podría ser una de las maneras de contrarrestar o al menos proporcionar otra opción de generación de fachada. Así se llego al hecho de que había que retranquear el paño de lo que sería la nueva fachada del edificio, generando una pausa que diera un respiro antes de seguir con el repertorio de intentos fallidos de arquitectura.
Una vez definido el punto anterior se empezó a trabajar en propuestas para la solución del programa planteado, donde la estructura existente fue punto primordial para definir que el DOJO y el DESPACHO debían ir en un segundo nivel, para poder tener alturas que resolvieran la cuestión del cambio de volumen de aire para un espacio y la riqueza espacial para el otro. Dejando en planta baja cafetería y oficinas para renta. Estructuralmente se decidió no derribar muros y desplantar columnas como sería lo usual, pues este técnica incrementaría el costo de la edificación, se opto pues por reforzar la mayoría de los muros mediante el adosamiento de otro muro nuevo con un total de 35 cm de espesor, dando la idea de unos muros que aunque no muy altos y sí gruesos y fuertes son capaces de sostener un elemento de mayor dimensión. El DOJO se ubico al frente del edificio con lo que se opto por una fachada acristalada que permitiera la difusión inmediata de las actividades ahí realizadas, la cafetería entendida como negocio se solicito también en vidrio por parte del cliente, toda vez que ambos niveles se resolvían en vidrio, se pensó en la necesidad de generar un vínculo no solamente visual si no físico que manifestara una fachada integral en lo que a su piel o textura se refiere. Logrando así el desdoblamiento de una fachada de vidrio que viaja en su eje X, Y y Z para brindar una liga y protección ininterrumpida a los dos niveles. Hablando un lenguaje parecido nacen dos muros, los de las medianeras o colindancias, los cuales salen o entran al edificio según se vea y logran el efecto de contención, de tal suerte que desde la calle el usuario puede fijar su atención en el edificio a pesar de tratarse de una fachada retranqueada.
Al interior del edificio se conserva el patio trasero convertido en terraza para las oficinas y se crea un patio interior el cual brinda ventilación e iluminación natural espacios de planta baja y planta alta. Logrando con esto un bajo consumo de energía incluido el DOJO donde se maneja una ventilación cruzada entre fachada principal y una gran ventana que desemboca al patio interior mencionado.
La paleta de materiales es la usada en la región: muros de tabique, losas aligeradas (vigueta y bovedilla) repellado en muros exteriores, yeso en muros interiores, pisos en loseta cerámica y loseta cerámica en colores ocres en algunos muros para reforzar la geometría del edificio, así como vidrio tintex y aluminio anodizado color natural.
SUR 22 Escuela de Artes Marciales
El edificio SUR-22 es el resultado de la reestructuración y ampliación de una casa habitación construida en la década de los 70. Emplazada en un predio de 10 m de frente por 26 m de fondo en un barrio habitacional de clase media al sur de la ciudad de Puebla y cerca de la universidad autónoma. La casa cumplía con los estándares de aquellos tiempos: programa resuelto en una sola planta, altura de entrepiso de apenas 2.3 m, muros de carga y una sola trabe, cochera al frente y un patio trasero de servicio, la fachada era en realidad una pequeña muralla aportando poco menos de lo que ofrece un volado de concreto armado en tención sobre una delgada hoja de metal en duela.